(Varios textos sobre “Qué significa la danza en este tiempo de reflexión?” de mi equipo creativo, en representación de mi compañía Compañía Olga Pericet):



Año 2020, el tiempo ha parado la escena y tantas cosas… pero nuestro cuerpo sigue porque el movimiento continúa, la Danza siempre está con nosotros, en cualquier espacio, no importa la forma, es parte de nuestro ADN.

A veces la danza es silencio, sólo tienes que escuchar tus órganos que respiran y marcan el tiempo, el ritmo , el compás…

La Danza hace que la mente sea libre, que escuche, que no tenga prejuicios. Me imagino que a algunos no les interesa esto!

La Danza hace viajar hacia fuera , donde todo se mueve y tiene el poder de cambiar, sanar, transportar ideas . Nos pertenece a todos y está en todas partes. El universo está en continuo movimiento, tiene su propia danza y bailamos con ella.

¿Porqué nos quitan la libertad? ¿Qué nos está pasando? La naturaleza ya esta prácticamente fuera de nosotros, nos la están arrebatando y hemos aprendido a maltratarla y a destruirla sin que nos importe. ¿Porqué nos despojamos de lo mas esencial de nosotros mismos; porqué no lo protegemos?

“La Danza se ha convertido más que nunca en una profesión de fe”.

Olga Pericet  (bailarina, coreógrafa y creadora)



Antes que la palabra existe el cuerpo y en la relación con otros cuerpos, nace una historia. La abstracción de un gesto llega allí donde no llega el lenguaje y sin embargo, convoca la emoción, incluso lo innombrable. En la repetición de un gesto aparece el ritmo y se dibuja una música que no escuchamos con los oídos; vemos la melodía dibujada en el espacio, respirada en el aire, como el aleteo de un pájaro que emprende el vuelo hacia un destino incierto, donde el propio vuelo es el proceso vivo de la intuición que nos impulsa al viaje; un viaje hermoso aunque accidentado, donde el pájaro, como el bailarín, sortea y crece en cada obstáculo queriendo transcenderlos límites.

Carlota Ferrer (directora escénica, coreógrafa, creadora y actriz)



Me seduce la idea de un cuerpo que adquiere dimensiones incalculables en el momento y a condición de que se renuncie a de-finirlo o a de-terminarlo; de un cuerpo que se expande, como dices, en los silencios, en las reticencias, en las lagunas, en las omisiones, en esa nebulosa sustancial de indeterminaciones que rodea los puntos notorios, los eventos de una vida, como la "materia oscura", sin que podamos verla, rodea los patrones de puntos y líneas de nuestras estrellas, de nuestras constelaciones. La danza de ese cuerpo infinito es la voz impensable o imposible de aquello que habla en nosotros antes de que cualquier palabra sea dicha: la de nosotros que, estando en el mundo sin haberlo asumido del todo, nos disponemos a gritar y dar golpes como desde el útero materno.

La caja de Schrödinger es una caja de cartón con un gato dentro. Mientras no abramos la caja, no sabremos si el gato está vivo o muerto. Mientras no la abramos, la caja contiene sólo un gato confinado que espera haber existido. Mientras no podamos bailar, siempre nos quedará esta danza: la pequeña música discreta, el ruido "finito", rítmico, apocado, de una caja abandonada a orillas de un mar, en el borde de una gran inclemencia, de un ruidoso sinfín. Hacemos aspavientos sonoros para decir que el gato aún no está muerto, o aún no ha nacido.

Roberto Fratini (dramaturgo, profesor y teórico en danza)



La danza puede llegar por casualidad y se queda en cada persona por motivos distintos. Hay tantos tipos como individuos.

La simpleza, la belleza, la extensión y la amplitud, los detalles, la introspección. El camino, los resultados, el aprendizaje. Un mundo sin límites. Transfigurar el cuerpo. Ponernos en contacto con lo espiritual a través del físico. El ritmo. El sudor. La energía no solo sustenta la vida sino que mueve todo a su paso. Conexión con todo y con todos. Comunión.

La danza es difícil de explicar y fácil de experimentar. Inmediata. Prueba y verás.

Danza la vida, el viento y los astros, baila la luz que baña y refleja y rebota. Bailan los pájaros, la corriente y los átomos. Todo vibra. Algo se mueve.

No es preguntarse porqué la danza. Hay que darse cuenta que nos envuelve, que todo fluye. Deja que sea parte de ti. Sé un instrumento, haz tu parte en la orquesta universal. 

Espacio,  tiempo,  forma: sumando, chocando, saltando, en paralelo; secuencias encadenadas. Relaciones humanas.

Respira

Algo se mueve


Paco Villalta (bailarín, profesor de danza y fotógrafo)




La danza como forma de vida: desde el vientre de nuestras madre, desde el inicio existe el movimiento. Cómo te mueves en la vida, cómo la sientes, cómo le bailas a la vida. Te balanceas, te frenas, te dejas ir, confías? La danza te rompe pero te reconforta. Te conecta con tus instintos y también con el silencio de tu interior, con la sabiduría de tu cuerpo.

La danza en 1a y 3era persona me ha llevado a lugares que mi intelecto prohibían. En esta vida hay que saber bailar, bailar! Y bailar bien alto!


Elena Martín (gestora cultural y bailaora)





Compañía Olga Pericet 

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